viernes, 8 de marzo de 2013

Tanto por decir al respecto,
y sin embargo,
ninguna palabra parece suficiente...
Ninguna expresión se yergue,
con valentía,
para permitirme nominarlo/te...
Ninguna es capaz de abarcar
la densidad del sentimiento,
la profundidad de la emoción...

Y, de repente, un grito mudo:
calla mi ser en la noche inmensa...
Un grito mudo
que se ahoga en la negación
de una realidad irrefutable,
de un sonido que no deseo escuchar....
De una verdad que quisiera seguir ignorando,
que hubiese deseado no conocer jamás...

No hay comentarios:

Publicar un comentario